La Gran Comisión de Jesús fue: “Por tanto, id y
haced discípulos a todas las naciones”. Dentro de este mandato, nuestro pastor
Jacobo Beomón ha ido compartiendo con nosotros una serie de pequeñas enseñanzas
a fin de desarrollar en nosotros discípulos, las cuales deseamos comenzar a transmitir
a través de Convenci2.
El libro de Marcos en su capítulo 5:25-34 reza:
“Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastando todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. Porque decía: Si tocare tan solamente su manto seré salva. Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote. Luego Jesús, conociendo en sí mismo el poder que había salido de él, volviéndose a la multitud, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos? Sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quien me ha tocado? Pero él miraba al rededor para ver quien había hecho esto. Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad. Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; vé en paz, y queda sana de tu azote".
El poder de Jesús “fue liberado” sobre la vida
de esa mujer debido a que ella actuó movida por su fe (la fe sin obras es
muerta Santiago 2:17). Nuestro Señor Jesús nos está diciendo hoy: “Activa tu fe
en Mí y libera mi sanidad sobre ti”.
Hoy estamos Convenci2, lo cual queremos
compartir contigo, que Jesús nos está llamando a “Activar nuestra fe”, ya que
si lo hacemos, sanará nuestras dolencias y enfermedades, liberará su bendición
sobre nuestras vidas y nos transformará para poder vivir cada vez más la vida
en abundancia que Él nos prometió (Juan 10:10).
Dios te bendiga.
Douglas y Dayana García.
No hay comentarios:
Publicar un comentario